¿Quién Soy?

| sábado, 13 de febrero de 2010 | 1 comentarios |
Hace rato estaba leyendo la entrada de blog de un amigo y me pareció interesante el ejercicio que propone. Pensaba responder en su blog pero, como usualmente me extiendo mucho al escribir, mejor vine al mío para extenderme como verdolaga de letras. LOL.

Y así, comienzo.

¿Quién soy?
Soy un ser humano, con defectos y virtudes, emociones, ilusiones. Mi sexo biológico es el femenino, al igual que mi género en la sociedad. Sinceramente no tengo idea de cuánto mido, en unos lugares me sale el resultado de 1.52, pero las malas lenguas dicen que mido 1.55....me dan falsas esperanzas. Tampoco sé cuánto peso, hace mucho que no me subo a una báscula ni por error. No soy deportista, ni en lo más mínimo y a ello se deben mis problemas de enanismo.

Así bien, la carencia de actividad física la compenso con actividad neuronal. Me gusta mucho imaginar cosas, todo el tiempo lo hago. Voy en el camión escuchando música e imaginando escenas, de mis propias vivencias me imagino "lo que hubiese pasado si....", mi vida es una constante espiral de fantasías y escenas de la realidad.

Puedo considerarme una mujer tranquila, hasta cierto grado. Adoro observar a las personas, imaginando lo que estarán pensando o el porqué de sus acciones, hábito que se me quedó desde que llevé la clase de Antropología en 3er semestre de la carrera. Sin embargo, pese a que muchas ocasiones soy demasiado quieta, también puedo llegar a ser totalmente ruidosa, hiperactiva y risueña.

Me fascina reír, realmente lo disfruto de sobremanera. Siempre me estoy riéndo, aunque esté sola. Me riò cuando hago algo tonto, cuando acierto algo, cuando me da pena, cuando algo me da gracia, cuando recuerdo, cuando conozco a alguien....todo el tiempo estoy riéndo, mi mamá me regaña por eso, según ella dice que me haré vieja y arrugada por tanto gesto, pero no me importa.

Nunca he sido demasiado vanidosa, aunque confieso que me gusta dar una apariencia de alguien "profesional". Mis colores favoritos son el rojo oscuro, negro, azul marino y violeta; aunque mi ropa no sale de la escala de negro y gris. Me pinto para verme más grande, porque mucha gente me ha dicho que parezco "preparatoriana", cosa que me frustra porque no he vivido 22 años por nada. Como sea, me disgusta e incomoda que me digan que soy "bonita", incluso me enfurece un poco la idea...siempre he pensado que la belleza es subjetiva, superficial y pasajera; asì que no tiene mayor peso en mi vida y sí soy o no soy bonita es cuestión de perspectivas.

Soy algo obsesiva. Por ejemplo, si mi mano derecha toca la textura suave de una tela, la izquierda DEBE hacer lo mismo para que pueda estar tranquila; si algo lo siento "incompleto", le doy vuelta en mi cabeza a las cosas hasta dar con alguna maldita cosa que deje las cosas "completas".

Me gustan las cosas de terror pero soy una maldita miedosa, xD de las que brincan en el asiento cuando aparece el villano. Je, quizá porque me meto demasiado a las historias y vivo en la piel de cada uno de los personajes, de manera que su susto es el mío y realmente eso lo sufro y al mismo tiempo lo disfruto.

AMO la lluvia como jamás creí amar algo. Disfruto demasiado los días nublados, las primeras gotas de lluvia y la misma lluvia a cántaros. Siempre he dicho que en mi vida pasada debí ser un árbol porque espero la época de lluvias con gran anhelo, y aunque no sea época de lluvias siempre estoy pidiendo que llueva a mis adentros. De hecho, amo el agua con mucha intensidad, y aunque aveces me da miedo la inmensidad del mar....le respeto con una devoción que aveces tiene toques maternales. Soy de las personas que "acarician" el agua, que le hablan y que se bañan cuando lavan los trastes por estar "jugando" con el chorro del grifo. Por lo mismo, cuando me describi a mi misma suelo decir que soy como el agua: me adapto a los moldes, aunque prefiero fluir con libertad...evaporarme y caer de nuevo a la tierra en un derroche de adrenalina, congelar mis emociones para perpetuarlas por la eternidad.

Je je, soy de las personas que atesoran recuerdos, que los revivien en su cabeza una y otra vez por el gusto de recordar las viejas emociones, sensaciones, olores, paisajes, sonidos....me gusta recordar con la misma intensidad que viví aquellos momentos, pues de alguna manera me hace sentir que todo tiene sentido.

Aveces la gente me llama "loca", porque cambio de estado de ánimo como de calzones. Cada día soy una mujer distinta, cada noche soy una mujer nueva. No puedo ser constante en algunas cosas, me gusta reinventarme todos los días, y aunque las personas por fuera me vean igual, nadie sospecha quizá lo diferente que me siento cada día. Aveces para bien, aveces para mal.

"Vivo sin vivir en mí, y tan alta vida espero, que muero porque no muero" Ésa es una frase de Santa Teresa de Jesús que me gusta, jajaja, soy teresiana de clóset. Estudié la secundaria y la preparatoria en el Instituto Jassá, y de alguna manera muchas cosas que viví se me quedaron grabadas. Las cosas que me dijeron aún las recuerdo, aún forman parte de mi vida pese a que no fue hasta la Universidad en dónde viví una de las mejores épocas de mi vida....Y aún así, cuando me siento sola recito la frase que aprendí en el Jassá: "Nada te turbe, nada te espante, Dios no se muda, la paciencia todo lo alcanza....a quién Dios tiene, nada le falta". Algo así va xD.

No voy a decir que soy una persona religiosa, de hecho estoy a un paso de ser considerada atea. Detesto las misas, a los sacerdotes y sus sermones....pero creo en un Dios, me gusta hablar con él y contarle chistes. Yo creo que Dios debe ser un ser "a todo dar", y me disgusta llamarlo "Señor", xD como que no le va un trato tan distante. Y sí, no me da pena decir que lo quiero mucho, que ha sido a toda madre conmigo, ^^ incluso que de cariño le llamo "apá".

Otra peculiaridad mía es que me encanta leer, y de nuevo volvemos al plano de la fantasía. Disfruto mucho cada historia que tengo entre las manos, me entrego a ellas en un 100%, revivo cada imagen en la medida en que puedo imaginarlas y sentirlas, aveces no conozco muchos olores o texturas descritas, pero me complace "inventar" un referente para no perderme el momento....y despuès busco el referente original, por mis obsesiones de "completar" las cosas.

Me gusta escuchar a la gente, y hablar. Aveces no tengo gran cosa que decir, pero soy fanàtica de contar hasta la màs estúpida tonterìa...claro, esto con las personas importantes para mì, pues soy también muy celosa con las cuestiones referentes a lo que pienso, siento, imagino, creo. No suelo compartir de mí mucho con los "extraños", pues considero que es una falta de respeto a mí misma.

Soy una fanática de investigar, conocer....no me considero una sabia, ni alguien demasiado inteligente, aunque tampoco soy una idiota. Tengo facilidad para aprender ciertas cosas, dificultad para otras...es decir, tengo inteligencia promedio y me parece aceptable aunque no me conformo. Quisiera saber màs, para poder compartir màs. Siempre he pensado que el conocimiento es lo ùltimo que alguien debe ocultar.

Me gustan los perros, xD desde los 13 que soy un ente "oscuro"....comencé a seguir la cultura dark por un enamoramiento que nunca pudo pasar al plano de relaciòn sentimental...con el paso del tiempo me hundì en esa deleitante oscuridad y no fue hasta la Universidad en dònde me decidí a seguir la cultura gótica sin hacer demasiado alarde, aunque con la emoción e ilusión de ser parte de algo, de conocerlo, de disfrutarlo...Siempre he creído que la oscuridad me buscaba, pues desde pequeña me gustan y fascinan los seres de la noche. ^^ Me envuelven en sus misterios, pues confieso ser una fanática de ellos.

Soy enamoradiza, DEMASIADO enamoradiza. Veo a alguien que me gusta y se me van los ojos, por eso tengo tantos problemas...porque realmente no me enamoro de cualquiera, sino que busco cierto prototipo, o mejor dicho, busco a cierta persona.

Me gusta dibujar y escribir, creo que vivo para esto jajaja, para escribir más que para otra cosa, por lo cual me frustro mucho cuando me veo impedida de hacerlo, ya sea porque nunca falta la madre gritona que me espanta la inspiración por pedirme un vaso de agua, que recoja algo, o simplemente que deje de hacer "tonterías" y me vaya a dormir...me frustra y me entristece demasiado, pero realmente ruego todos los días porque algún día pueda salir de aquí y terminar la historia que me roba la cabeza desde hace ya varios años.

=u= Y pues esta soy yo, claro, me falta definir muuuchas cosas de mí, pero :P sinceramente no me apetece exponer toda mi alma en un solo post, prefiero que aquellos a quiénes les interese se atrevan a convivir conmigo y a conocerme....

C'est la vie~

.............La novela que cambió mi vida..............

| lunes, 8 de febrero de 2010 | 0 comentarios |

El día de hoy, no quiero ser yo la que escriba demasiado, no puedo....mi alma entera está en el limbo. Vaya, estoy fascinada y la sonrisa no puede ser borrada de mi rostro. Hoy vi la adaptaciòn de la novela que cambió mi vida: Dorian Gray.

Las críticas son malas, la historia mucho se separa del libro, pero aún así me agrado. Y la razón por la que me gustó fue sencilla. Cuando leí Dorian Gray, Óscar Wilde de alguna manera cambió la vida...y gracias a ése cambio, pude descubrir en mí aquella llama que había querido apagar a fuerza de estúpidez.Entonces comencé a escribir.

Cosa curiosa, justo ahora que más floja he andado con mi propia novela, pese a lo mucho que la pienso y que me importa, Dorian Gray vuelve a hacer acto de presencia para recordarme la valiosa lección de mi maestro: mi vida, tiene que cambiar ahora.

Dorian, cuando te conocí eras de un hermoso cabello rizado y rubio, con inocentes ojos azules...ahora que has vuelto, tus ojos son oscuros y tu cabello negro cae en melena sobre la piel extremadamente blanca y limpia de un hombre con facciones delicadas, pero varoniles...delgado, que le va sensacional el color negro...vaya, el regreso de Dorian Gray me pareció más como si el personaje en cuestión hiciera cosplay de mi propio personaje: Raymond Loubet.

Je, por mucho que en Salomé Óscar Wilde haya dicho que no hay que fiarse de los simbolismos, porque solo nos complican más la vida; creo que en este caso no aplica. Y gustosa comprendo eso, mi vida tiene que cambiar ahora por Raymond. Así que, los dejo con él.

Muchas personas no comprenden el valor de un recuerdo, yo mismo no lo haría de no ser porque en la praxis, yo no los tengo. Así que, curiosamente he llegado al mundo para aprender una lección sobre el origen; y es que, cuando veo a mi alrededor, no hay ser viviente que no tenga en la mente lo mucho que el pasado le influyó para ser quién es. Algo curioso, si me permiten hacer la observación.

En lo personal, quizá me maravilla porque escasamente sé algo de mí. ¿Quién soy? ¿Cuál es mi nombre? ¿De dónde vengo? ¿En dónde está mi origen? ¿Por qué mierda nada recuerdo?...no lo sé, y realmente quiero saberlo.

Para ser más claro, y sin hacer alarde de otra cosa que no sea la verdad, podríamos decir que todo el mundo es una pecera. Una muy lujosa, por cierto: con relieves, vegetación y muchas clases de peces coloridos que nadan en una tranquilidad bastante peculiar. De pronto sucede el clásico evento en dónde un pez grande se come al chico, aunque después muera por las mordidas de miles de pecesillos iguales al que tomó por almuerzo...eso es el mundo, y de ése mundo podría contar millones de cosas más, porque yo lo observo todo desde afuera Y así, mirando a los pececillos nadar en las aguas tranquilas, se me ocurre meter un dedo para dejar que los más curiosos se acerquen. Alguno de ellos se atreverá a morder, y entonces mi ponzoña pasará a él...porque yo quiero estar dentro de la pecera.

Sé que alguno debe preguntarse "¿y para qué diablos quieres estar dentro de esa inútil pecera si estás en el nivel de los dueños de la misma?" Pues...es sencillo, realmente no soy el dueño de la pecera, pero soy el vecino de confianza que vive cruzando la calle. Un vecino con la cabeza atrofiada, que vagamente recuerda haber escondido algo en aquella pecera....algo sobre su origen. De ahí que necesito un enlace, y mientras el pececillo envenenado va nadando por ahí sintiéndose extraño, yo aguardo el momento de verlo caer. Tardará, pero caerá y entonces mi ponzoña pasará a su estirpe, en dónde algún desafortunado tendrá que compartirme su vida entera: pasado, presente y futuro....y así será en cada una de las peceras de los vecinos, hasta que algún día encuentre mi propio pasado, mi prente...ya que sólo así podré construir el futuro, pues para mí no hay nada que me pueda ser vetado de inexistente.

.........................Tears..........................

| domingo, 7 de febrero de 2010 | 0 comentarios |
Mirando hacia la calle, mientras llovía sin cesar, escuchaba en mi interior el susurro de una voz que mi lógica pretendía ignorar.

Entonces volvía la mirada hacia el interior de aquella pieza vagamente decorada, que daba una sensación de abandono y descuido, como si nadie viviese allí.

Una cadena de suspiros se atoraban en mi garganta, empujándose unos contra otros en su lucha por salir de mí y liberar mis pulmones, aunque quizá más que a los pulmones esos suspiros pretendían dar calma a esa cosa que habita en mi, a esa maldita voz delirante que siempre me susurra tonterías poco interesantes como la justicia y el sentido del deber.

Pero como todo humano, no soy invencible y se me escapa un maldito suspiro mientras pretendo encender un cigarro y asfixiar con su humo a la voz mundana. Suelto una risotada; aunque mis pulmones han descansado, la voz sabe bien que aquél suspiro fue como una simple gota de agua perdida en el abrumador desierto de mi infamia. No le trae calma suficiente, pero sé que lo agradece como si se lo hubiese regalado de forma benevolente.

El humo del cigarro pronto me entra por la nariz y la boca, lo inhalo con voracidad al tiempo en que mis ojos se desvían a la ventana. Sigue lloviendo, las gotas hacen música cuando caen al suelo. Me parece mágico, aunque de pronto un tanto nostálgico.

Llovía cuando descubrí que mi vida no era lo que esperaba, llovía cuando renuncié a ser lo que anhelaba...llovía mientras intoxicaba mi alma con el humo de un cigarro devorado por el pequeño fuego que se abría paso en sus entrañas.

Y volví a reír una vez más, lo he perdido todo menos la lluvia, ésas constantes lágrimas ajenas que caen allá afuera por mí. Lágrimas que no son mías, que nunca lo serán, pero que siempre lloraran para acompañarme a mí.

Pues allí está, xD el primer cuento corto inspirado en lágrimas y lluvia. :3 Para aquellos que disfruten compartir con la lluvia sus pésares, porque sin duda aquellas pequeñas gotas de agua son la mejor compañía en una tarde melancólica.

Es decir, llorar con la lluvia, es como si una persona se encontrase con otra compartiendo el mismo pesar; y para los que no somos fanáticos de las lágrimas (y que aún así no las podemos evitar) resulta gratificante, pues te invita a no sentirte tan estúpido mientras sientes que de tus ojos se escapan esas gotas de agua tibia que son la mejor prueba al delatar el alma que se esconde entristecida.

XD Bueno eso pienso yo, quizá muchos no compartan la idea o quizá sí. Lo único que me resta añadir es: hay que atreverse a sentir cosas nuevas, por tontas que parezcan.

:3 Je, también aprovecho para dejar la canción que estaba escuchando cuando escribía... canción que bien pudo haber alterado mi ànimo lo suficiente para narrar lo anterior, aunque confiezo que lejos de andar melancólica, xD me siento a todo dar.


...................Rain........................

| viernes, 5 de febrero de 2010 | 1 comentarios |

Te extraño, no quisiera admitirlo pero lo hago. Quisiera tenerte aquí, de nuevo a mi lado, sentir tus caricias heladas y deleitantes, tu singular alegría que robaba de mis labios la sonrisa sincera y única, una que rara vez me atrevo a esbozar.

Hoy sin ti, la melancolía llegó a mi alma pretendiendo quedarse, desgarrando mis ilusiones con jirones de luz y fragmentos de calor.

Permiteme ser redundante, porque sin ti el día es insignificante; tu compañía me relajaba incluso en el silencio que tanto abruma mi alma, me inspiraba mientras caminaba por la calle, me invitaba a bailar, a reír, a ser feliz un instánte.

Para mi desgracia, tuviste que marchar, no te lo reprocho pues asì tenía que pasar...por más que te extrañe, por más que te necesite, si aclamo tu presencia de nuevo será egoísta de mi parte. No te culpo querida, quizá mejor que nadie comprendo la virtud de encontrar en tu esencia rasgos de nobleza y crueldad.

Volverás, y aunque lo sé me cuestra trabajo la idea de esperar. Mientras otros hacen su compañía al sol del medio día, mi ser entero se refugia bajo el recuerdo de aquella tardes mágicas en las que ceñida a ti encontré un fragmento de auténtica libertad.


._. No pregunten, soy mala tomando fotografías y la poesía no se me da, así que elijo combinar estúpidamente la prosa y el verso para ver que resultado puedo encontrar xD.La presente narración está dirigida a mi encantadora novia la lluvia, porque sin su presencia en mi vida me siento algo...incompleta. Alguna vez me recomendaron que me fuese a vivir a una zona dónde llueva mucho, pero :/ usualmente en esos lares hace mucho calor y pues da la casualidad que ODIO el calor, el sol...así que me conformo con tener la época de lluvias una vez al año, más las lluvias espóradicas que me caen como regalo divino en cualquier otra época del año.


Resulta que muchos no valoran la lluvia; quizá porque no quieren salir a sentirla y vivirla, lo cual se traduce como que a la lluvia le atribuyen el hecho de que no puedan hacer "lo de siempre"...bueno, para mí esas personas son algo ilusas, pues la lluvia ofrece precisamente un momento de quietud, o de aventura, de magia...simplemente lo que ofrece es la oportunidad de vivir algo que no es "lo de siempre".

¡Ah que mágico es caminar bajo la lluvia! Puede ser molesto, lo sé. El agua es fría, para los que usamos lentes nos impide ver (oh sí, los empaña y cuando nos quitamos los ojos postizos el mundo se vuelve una mancha), pero aún así es refrescante. En lo personal, me encanta. Llueva a cántaros o de ésa curiosa manera en dónde apenas se pueden sentir las traviesas primeras gotas de agua...cuando camino bajo la lluvia, mi alma se libera un segundo y fluye, se evapora y regresa como un torrente de emociones que algalopan mi corazón a un punto inexplicable. Entonces vivo con la lluvia, y hasta ganas me dan de reírme valiéndome poco lo que piense la gente.

Hay tantas y tantas cosas que podría decir sobre la lluvia, al grado de que pienso compartir algunas de mis reflexiones por el simple placer de que si alguien lee esto, quizá se atreva a vivir la lluvia al menos una vez en su vida.

.........Sueños.........

| martes, 2 de febrero de 2010 | 0 comentarios |
xD Vengo con un sueño atrasado, LOL y no es que no haya dormido o algo, más bien que escribí está entrada antes pero D: en la computadora en dónde la escribí me borro todo lo que hice cuando di click en "publicar"...así que here I am, xD intentando publicar un resumen de aquello que soñe hace 2 noches...



Edades y Máscaras.

Comenzamos el viaje con una pequeña maestra que va a dar clases particulares a sus alumnos, a uno en particular que en clase le saca canas verdes (pero al que tiene que poner al corriente xD y lo peor sin compensasión económica.) Cuando la chibi maestra llega a la casa del susodicho alumno, el chico baja acompañado de otro muchacho de cabello negro al que hace llamar su primo y el que pasará a ser un alumno más para la maestrilla. Ahí comienzan los problemas.

En medio de la clase particular, el alumno pide un receso y se va a hacer boberías por ahí, mientras la maestra observa al primo como esperando que se largue también...pero el chico no lo hace, al contrario, comienza a entablar una conversación con la maestra que pasa de lo "típico" a algo no tan convencional que a los dos agrada. Él se aproxima a ella, le habla con voz queda e incluso la hace sonrojar, entonces la maestra se da cuenta que el chico no es un jovencito cualquiera....aquel chico de cabello negro es "Él".

En medio de risas que pretenden ser discretas, Él toma la mano de la maestra y le pide que viajen juntos por la eternidad (sí, así es de literal), ella acepta y justo cuando el primo se acerca a robar el primer beso del sueño, algo pasa que los dos tienen que separarse y la maestra debe marcharse. Así bien, afuera de la casa del estudiante, la maestra pronto se da cuenta que se acaba de comer sus palabras de golpe, el horror la invade y grita "¡¿Ando con un menor de edad?!"....[¡Oh noes!]...y ella que habìa jurado jamás volver a relacionarse con alguien más chico, ahora se aguanta y se calla la boca, pues incluso su más cercana amiga le recuerda las palabras que minutos antes le cayeron como balde de agua helada...

Y de ahí las escenas se vuelven borrosas, el frío despierta a la joven que sueña y después de levantarse medio adormilada para jalar la cobija, vuelve a internarse en el mundo de los sueños...

Entonces la escena cotidiana se vuelve distinta, y pronto una muchacha extremadamente delgada y de corto cabello rizado [de un matiz rubio cenizo] camina tranquilamente por los pasillos de un supermercado que está casi vacío. Lleva la respiración acelerada mientras empuja su carrito, puedo ver su pecho que se levanta y se contrae, puedo ver sus ojos que fijos en el frente reflejan temor....y más allá de ella, puedo ver el motivo de su agitación: la sigue una persona vestida totalmente de negro, que lleva un sombrero de ala ancha y una máscara blanca sobre el rostro [ el sueño me recuerda a la pelìcula de V de Venganza, salvo que la chica no es Natalie Portman]...

La joven serpentea por las islas de atunes, de mariscos en hielo y leche de caja, pierde a su acosador un minuto y aprovecha para correr desenfrenada, internándose en un pasillo para esconderse entre un hueco existente entre los empaques de papel higiénico...pronto escucha los pasos del tipo con la máscara y ruega en silencio porque pase de largo. Su súplica es escuchada.

Tras los pasos de aquel hombre y el sonido metálico del carrito, la chica sale del hueco al sentir que el tipo está a sus espaldas, se tira al suelo y aprovechando su figura esbelta, comienza a meterse bajo el estante de los productos. Puede ver los pies del hombre, las llantas del carrito y escucha que el joven avienta los paquetes, se asusta pero ahoga los gritos en su garganta, o al menos eso intentó hasta que observó la máscara del hombre, que se había agachado y encontrado a su presa antes de lo esperado. Entonces la chica sale de su escondite y corre, con aquél extraño hombre pisándole los talones. Sale del supermercado, la calle está a oscuras y sólo un farol lejano proporciona un poco de luz. Ella corre, se esconde entre el hueco existente entre una vieja camioneta y una pared, vuelve a rogar que no la encuentren....pero su súplica no es escuchada.

Cuando la chica levanta el rosto, el hombre de la máscara está justo a un lado de ella, levanta y brazo y ella intenta cubrirse la cabeza con las manos esperando el trancazo. Y no ocurre nada. En medio de aquella confusión, la joven levanta a duras penas su cara, para ver una rosa roja frente a ella, la observa con curiosidad hasta que dos fuertes manos la toman por los hombros para sacarla de su escondite.

Y de ahí, el misterioso muchacho subió a la chica a su carro, que por la disposición del volante recordaba a un automóvil londinense (europeo, mejor dicho). Mientras pasaban por algunos locales de comica y otros en obra negra, uno de los cuales llamó mi atención (pues de pronto la chica era yo, con mi físico y todo....) por sus letreros brillantes que anunciaban la próxima apertura del departamento de comunicación del estado, algo que me obligó a pensar "voy a venir a dejar mi currículum para ver si me dan trabajo"....

De pronto el coche detuvo su paso y el misterioso enmascarado bajo del coche para pedir un mollete de avena con miel (._.u) en un puesto de comida atendido por dos hombres de apariencia musculosa, que servían sobre mitades de bolillo miel y una cosa que se supone era la avena, aunque recordaba más relleno de los pays de queso que venden por las mañanas junto a los jugos de naranja y zanahoria. Después de pedir su "torta" de miel y avena, el enmascarado volvió la sonrisa burlona de su máscara a su no tan encantadora acompañante, diciéndole que le pediría un mollete para ver si le gustaba. Así que tras atender a su dama, el enmascarado volvió al carro y se retiró la máscara, dejando ver aquél rostro perfecto que a ella siempre le robaba el aliento...

-"y yo que te creía V"- expresó ella anonadada, mientras Él sonreía...tomaba su mano y la besaba con cuidado y después dijo algo en un idioma desconocido, sonriendo con esa mueca burlona que dejaba en ridículo a la máscara.

XD Y ya no me acuerdo de más. :3 Sin embargo, me hizo verdaderamente feliz volver a tener un momento con él...que aunque de pronto me aterra, al final sabe como compensar los ratos amargos que me hace pasar.